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Seguro que ha oído la estadística: “El 95% de las empresas fracasan en los 3 primeros años”.

Y la razón por la que esto ocurre es porque la gente sigue utilizando planes de negocio anticuados. Ya no funcionan en 2017. Hay una nueva forma de enfocar los negocios en la era moderna.

Tampoco se puede aprender a hacerlo en un colegio o universidad. La mayoría de los profesores nunca han montado un negocio y aceptarán encantados tu dinero inicial mientras te enseñan de sus libros.

Nuestra sociedad no está hecha para los empresarios (es obvio cuando pagas tus impuestos), pero hay algunas ventajas… si sabes lo que haces. Hay que hacer mucho para anular “el sistema” y ser tu propio jefe.

La única manera de empezar un verdadero plan de negocio es haciendo un montón de trabajo gratis al principio. Con el tiempo, la gente se dará cuenta de ti y tendrás la confianza para cobrar por tu producto/servicio.

La mayoría de la gente no está dispuesta a hacer los 7 pasos que recomiendo, y eso está bien. Todo lo que puedo decirte es que hay mucho más si lees entre líneas. Me entenderás cuando sigas leyendo.

La solución de 7 pasos para elaborar un plan de negocio perfecto:

1. Hable con los líderes de su sector: Antes de hacer nada, hable con las personas de más éxito en el sector al que se dedica. Antes de empezar, necesita conocerlos. Escuche lo que se debe y lo que no se debe hacer. Intenta averiguar la verdad que hay detrás de lo que dicen y fórmate tus propias opiniones basándote en tu discernimiento.

Yo lo hice elaborando una lista de 50 personas que parecían ser las más influyentes en mi campo. No llegué a todas, pero hablé con varias de ellas al mes. Me ayudó a saber qué tipo de persona quería ser (y no quería ser).

Creé preguntas de antemano y respeté su tiempo. Tanto si la conversación duraba 4 como 44 minutos, tomaba notas con diligencia y aprendí mucho en el proceso. Uno de ellos me convenció de que debía ser mi entrenador; tenía razón y nunca miré atrás. La clave: Consigue un mentor.

2. Cuente el coste: Después de realizar tus entrevistas, tienes que decidir si es algo que puedes hacer. Demasiadas personas empiezan sin saber si tienen lo que hace falta para tener éxito en su negocio y por eso fracasan. Tienes que tener una actitud de “lo que haga falta”.

Si estás dispuesto a trabajar de 12 a 14 horas diarias durante los primeros 1 a 3 años, puede que estés hecho para ser empresario. Si el dinero es más importante que el servicio que vas a prestar, fracasarás estrepitosamente. El dinero llega a quien mejor sirve, no a quien está más desesperado por conseguirlo.

Calcula el coste preguntándote: “¿Podría realmente utilizar mis dones para crear valor en este sector?”. Si la respuesta es “No”, quizá debas considerar esperar o buscar otra carrera. Si la respuesta es “Sí”, sumérgete con pasión y nunca te rindas.

3. Encontrar recursos (y conseguirlos): El aspecto más importante a la hora de poner en marcha un negocio es disponer de la información adecuada. La formación empresarial está muy infravalorada y demasiada gente cree que puede arreglárselas sin ella.

Acepta las sugerencias que te han dado en las llamadas telefónicas e investiga más en Internet. Esté dispuesto a conseguir los libros, leer los artículos, hacer clic en los sitios web, ver los vídeos y asistir a las conferencias. Paga por los servicios que necesites. No seas tacaño.

Sin los conocimientos adecuados, puedes quedar perplejo ante tu cliente o ser pisoteado por tu competidor. Procura aprender algo nuevo cada día y no te distraigas en el proceso. Aprenda también de gente de otros sectores. Los verdaderos emprendedores aprenden todo de todos.

4. Desarrolle normas para su negocio: Una base para tu negocio puede ayudarte a crear una vida sostenible. Sé capaz de desarrollar normas que funcionen para ti. Si el tiempo con la familia es importante, dedícales una hora al día. Tienes que crear equilibrio en tu vida.

Empecé utilizando 8 métricas en las que quería centrarme cada mes. Aquí tienes algunas de ellas que puedes tener en cuenta: el número de libros que quieres leer, artículos que quieres escribir, discursos que te gustaría dar, llamadas que querrás hacer, conferencias a las que quieres asistir, etc.

A mis clientes de coaching les encanta que trabaje con ellos en su plan. Les ayudo a rendir cuentas y a ampliar sus ideas. Tus normas deben retarte a ser mejor cada día. Te vendrá bien una pizarra blanca para crear el plan. Mi libro “The Winner’s Lifestyle” habla de esto ampliamente.

5. Diseña tu plan de ventas y marketing: Los modelos de negocio anticuados son rígidos, excesivamente ideales, aburridos y no han sido probados. A menudo no se anticipan a los cambios y pueden cerrarte el paso a posibles oportunidades. Lo peor de todo es que te hacen completamente inflexible e incoherente.

En su lugar, elabore un plan de venta y marketing. Marketing: Conseguir que la gente venga a tu negocio. Ventas: Tramitar tu producto/servicio una vez que llegan allí. Conozca la diferencia entre ambas y consiga 20 libros sobre cada categoría y conviértase en un maestro en la comprensión de las ventas y el marketing.

Necesitas comercializar en el año en el que estás. No comercialices y vendas como si estuviéramos en 1995. Actúa como si estuvieras en 2015. Si crees que “golpear los teléfonos” y repartir tarjetas de visita en eventos de networking te hará vender, no tendrás suerte. Utiliza las redes sociales de forma agresiva y da a conocer tu cara.

6. Practica tu discurso de ventas: Uno de los mayores errores que comete la gente es no aprender a vender. Dependen de construir relaciones a largo plazo que cuestan demasiado, lo que les priva de sus beneficios. De hecho, no saber vender es la principal razón del fracaso de los empresarios.

Empieza por hablar con tus amigos, vecinos, familiares, compañeros de trabajo, de clase, de gimnasio y con todas las personas que conozcas. Mantén la conversación y escucha sus preguntas u objeciones. Pídeles que te den su opinión y haz los ajustes necesarios sobre la marcha.

Cuando estés solo, trabaja para hacer frente a esas objeciones. Estudia qué puedes hacer para mejorar tu discurso de ventas y sigue perfeccionando tus habilidades. Si necesitas más ayuda, busca a alguien que sepa vender mejor que tú y escucha su discurso. Un pequeño secreto: hablar en público es una buena forma de aprender a vender.

7. Cree una lista de 100 objetivos: Haga una lista de todos sus compradores potenciales. Piense en todas las personas de su comunidad. Asegúrese de recordar a todas las personas de su pasado. Una vez que haya creado esta lista de 100 personas o más, llámeles. Utilice el correo electrónico sólo si no puede contactar con ellos por teléfono. El correo electrónico es el último recurso.

Empieza por las personas que más te quieren. Esto aumentará su confianza al principio. Sigue pidiendo la venta hasta que cuelguen. Nunca te rindas y sigue aprendiendo cómo puedes mejorar. No te obsesiones con las razones por las que te han dicho “no”. Recuerde también QTIP (Quit Taking it Personally).

Empieza hablando con 1 a 3 personas al día, y luego ve subiendo hasta 5 a 10. Con el tiempo, llegarás a hablar con más personas. Con el tiempo, cogerás el ritmo y tu ratio de ventas aumentará, pero tienes que ser persistente. Asegúrate de pedir referencias a tus clientes una vez que hayas realizado la venta.

Secreto: A medida que construyas tu negocio prestando un servicio de calidad, construirás tu marca automáticamente. No pienses demasiado en crear tu marca hasta que hayas atendido con éxito a unas cuantas personas. Se creará automáticamente.

Conclusión:

Si sientes que estás llamado a iniciar tu negocio, la gente te está esperando. Hay muchas más cosas en la creación de un plan de negocio, que aprenderás por el camino. Sigue recopilando conocimientos, escribe tus objetivos todos los días y emprende acciones masivas.

Ah, y gana dinero.

Ramiro Camiña

www.amazonaso.com.