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Si quieres vivir la vida, debes superar tus mayores miedos.

Algunos miedos nos frenan más que otros. Son como camisas de fuerza que nos atan y hacen que nuestros sueños sean imposibles. Sin embargo, si quieres tener éxito, debes enfrentarte a esos miedos y abolirlos por completo.

Cuando elimines tus miedos, te liberarás por completo y desaparecerán capas de profunda inseguridad. Ya no estarás a la defensiva, frustrado ni vivirás en la negación. Comenzarás a lograr más de lo que jamás hubieras imaginado mientras ayudas a otros en el proceso.

Aquí hay 7 miedos principales que TODAS las personas exitosas superan:

1. Miedo a la Crítica: Muchas personas tienen miedo de vivir sus sueños por temor a lo que otros puedan pensar y decir de ellos. Un estudiante universitario me escribió esta semana pasada: “Querido Daniel, mis padres quieren que termine mi maestría, pero yo estoy listo para empezar mi negocio. Pensarían que estoy loco si lo dejo ahora. ¿Qué debo hacer?”. Este es un tema común en muchas personas.

Temer lo que piense la gente te debilitará el resto de tu vida, aunque sean tus amigos más íntimos y tu familia. En lugar de eso, piensa en las posibilidades y en lo que dirían si alcanzaras el éxito. A este estudiante universitario le diría: “¿Y si tu negocio tuviera éxito y tus padres se sintieran orgullosos de quién eres? ¿Y si fuera la mejor decisión que has tomado nunca?”. Normalmente lo es.

2. Miedo a la pobreza: Muchas personas están atrapadas en el “modo supervivencia”. Un hombre escribió: “Tengo 26 años y estoy atrapado en un cubículo 40 horas a la semana. Pago las facturas y vivo una vida normal, pero sé que puedo tener un trabajo mejor y alcanzar mi máximo potencial. Estoy cansado de aburrirme y quiero utilizar mis dones. Sin embargo, tengo miedo de quedarme sin dinero. ¿Qué me sugieres?”.

El miedo a la pobreza es paralizante. Sin embargo, este joven expresó en su correo electrónico que tenía 10.000 dólares ahorrados, que serían suficientes para ayudarle a dejar su trabajo durante unos meses y buscar la ocupación o el negocio de sus sueños. Demasiadas personas se conforman con la mediocridad porque piensan que deben “sobrevivir” en lugar de “prosperar”. El miedo a la pobreza nunca debe frenar tus sueños.

3. Miedo a la vejez (y a la muerte): Hay una cierta edad en la que mucha gente abandona la vida. Benjamin Franklin dijo una vez: “La mayoría de la gente muere a los 25 y es enterrada a los 75”. Algunas personas también deciden parar antes de los 25 años. Acaban conservándose y se conforman con un estilo de vida mediocre. Estas personas piensan que no pueden lograrlo, así que acaban renunciando por adelantado.

El miedo a la vejez también puede ser perjudicial cuando una persona tiene que pasar por una transición profesional importante. “Tengo 46 años. ¿Cómo esperas que aprenda sobre el sector inmobiliario si me he dedicado a los seguros médicos toda mi vida? Además, tiene que salirme perfecto, si no, no podré mantener a mi familia”. Los que piensan que no pueden, no lo harán. Los que creen que pueden, lo harán.

Haz algo que temas todos los días-Eleanor Roosevelt

4. Miedo al fracaso: Aquí es cuando la mayoría de la gente se hace la pregunta “qué pasaría si…”. La única excepción es que lo hacen de forma negativa. “¿Y si no funciona? ¿Y si no le gusta a nadie? ¿Y si fracasa? Son preguntas equivocadas. En lugar de pensar en todos los fracasos, ¡piensa en todo el éxito que podrías tener! ¿Y si tienes éxito? ¿Y si a todo el mundo le gusta lo que haces?

Incluso si fracasas o cometes un error, te da la oportunidad de reflexionar y corregir. Por ejemplo, si accidentalmente condujeras por una calle de sentido único, seguro que darías la vuelta rápidamente si vieras que se te acercan coches. De la misma manera, no sabrías cómo serán tus resultados a menos que lo intentes. Debes fracasar antes de tener éxito. Todo maestro fue una vez un desastre. Adelante, ¡inténtalo!

5. Miedo a ofender a los demás: Un hombre me dijo el otro día: “No voy a llamar a Recursos Humanos hasta que ELLOS me llamen para el trabajo. Además, acabaré ofendiéndoles y no quiero que piensen que estoy demasiado necesitado. Esperaré junto al teléfono y ellos harán el seguimiento. Si no lo consigo, entonces no tenía que ser. Y de todas formas, si les llamo, podría arruinar mis posibilidades y entonces ¡nunca conseguiré el trabajo!”.

Creo que una persona debe actuar con audacia hacia sus sueños. Mucha gente teme ofender a los demás con su autopromoción por miedo a que la tachen de ‘arrogancia’. Sin embargo, nadie sabrá de tus diamantes a menos que se los muestres. Por lo tanto, no estarás ofendiendo a nadie si les muestras estratégicamente lo que tienes.

6. Miedo a parecer tonto: Muchas veces, miramos nuestros armarios y decimos: “No me pondré eso hoy. Parecerá una tontería. Quizá en otra ocasión”. ¿Por qué no ahora? A menudo actuamos como si lo que hacemos siempre fuera a salir mal, pero necesitamos tener fe en nuestra capacidad de decisión. Tenemos que poner a prueba nuestras habilidades, tanto si vamos a dar un discurso, escribir artículos, grabar vídeos o cualquier otra cosa.

Algunas de las mejores decisiones del mundo han sido fortuitas. Una y otra vez, la gente se ha desviado espontáneamente de sus planes originales y se ha abierto camino hacia el éxito. Descubre quién eres y qué encaja con tu estilo. A menudo, tendrás que empezar por descubrir quién no eres. Confíe en su instinto y sepa que está tomando la decisión correcta en todo momento. Sólo parecerás tonto si no haces nada en absoluto.

7.Miedo al éxito: La gente suele tener miedo de llegar a ser ellos mismos. Tienen miedo de su verdadera “autoexpresión”, que es de lo que trata el verdadero éxito. Observan a los demás y dicen: “Sabes, yo también podría hacer eso” o “¿Por qué no podría ser yo?”. La razón por la que dicen esto es porque tenían miedo de la fama, la riqueza, el reconocimiento y el amor que habrían recibido de otras personas.

A muchos de nosotros nos enseñaron que nunca podríamos tener éxito en la vida. La mayoría de las unidades familiares tienen arraigada la opinión de que tener éxito es poco realista, por lo que nunca presionan a sus hijos. Asumen que el éxito es imposible porque no lo han visto por sí mismos. En lugar de eso, desarróllate y cree que estás destinado al éxito masivo.

Resumen:

Todos estos miedos pueden superarse con fe y propósito. Si sabes lo que quieres y tomas las medidas necesarias para superar tus miedos, lograrás mucho más en tu vida. Sin embargo, debes ser sincero en tu autoevaluación y reconocer los cambios que debes hacer de inmediato. Cuando lo hagas, ¡alcanzarás tus metas más altas!

Ramiro Camiña

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