Las palabras se pueden usar o se puede abusar de ellas. Dependiendo de cómo las construyas, te pueden hacer o deshacer. Aquí tienes 5 frases ridículas que te meterán en problemas:
1. Estoy cansado: Muchas personas se aferran a su cansancio en lugar de a su energía. Se preocupan más por dormir que por prosperar. Cuando dices “estoy cansado”, inconscientemente te estás acercando a la cama y alejando de tu trabajo. Fomenta la pereza y disminuye tu capacidad de atención. Esto puede acabar distrayéndote, lo que te obliga a perder la concentración.
Una serie de afirmaciones positivas puede vencer a la fatiga. Si dices cosas como “tengo energía” o “estoy vivo”, te pondrás en una posición más favorable para el éxito. También debes emocionar con tus palabras. Esto puede hacerse mediante un cambio en tu fisiología. Un simple estiramiento, una flexión o un salto de tijera bastarán. Una vez que despiertes y cambies tu ritmo mental, experimentarás más energía de la que esperabas de ti mismo.
Si te dices grandes cosas a ti mismo, grandes cosas te sucederán.
-Ramiro Camiña
2. No está mal: En nuestra vida diaria, nos esforzamos por ser malos o perfectos. O tenemos un alto nivel de exigencia o nos conformamos con la tercera clase. Podemos aceptar la prosperidad divina o vivir en la más absoluta pobreza. La elección es tuya. La razón por la que menciono esto es porque la mayoría de la gente sabe que se rodea de cosas que están por debajo de la media. Cuando ven algo decente, dicen: “No está mal”.
En cambio, debes centrarte en dominar tus expectativas. ¿Quieres un coche que sea “superior” o uno que “no esté mal”? Si esperas resultados superiores, debes hablar en términos superiores. Si esperas resultados inferiores, puedes seguir hablando en términos inferiores. Por tanto, afina tu lenguaje y busca únicamente la prosperidad, rechazando a toda costa la pobreza.
Sé una fuerza de la naturaleza y todo se plegará a tu voluntad.
-Ramiro Camiña
3. Sigo olvidando: Esto es lo mismo que “no me acuerdo”. ¿Por qué te permites seguir olvidando? El gran hecho es que puedes entrenar tu memoria para recordar cualquier cosa. Sin embargo, debes tomar la firme decisión de hacerlo. Si no reconoces el poder de tu mente, puedes perder muchas oportunidades. Debe recordar personas, lugares y cosas.
La memoria es una habilidad importante que hay que dominar. No sólo los demás le percibirán como inteligente, sino que usted se sentirá más seguro en sus interacciones diarias. En lugar de creer que “se te olvida continuamente”, sería mejor decir: “Estoy intentando recordar” o “Si pongo mi mente a trabajar, puedo recordar el nombre de la película”. Nunca dejes que se te escape la memoria. Espero que recuerdes esto.
No olvides recordar. -Ramiro Camiña
4. No soy una persona madrugadora: Un chico me dijo directamente: “No puedo funcionar después de las 8 pm”. Para mi consternación, tuve que rechazar por completo su pensamiento. La verdad es que no se apaga a las 8 de la tarde, pero deja que su mente lo haga. Cree que puede entrar en un estado de reposo después de las 20.00, lo que le cierra a un mundo en el que podría dominar.
Solía decir “soy una persona tardía”. Sin embargo, me encontraba llegando tarde a casi todos los eventos. De hecho, una vez perdí un vuelo internacional, que me iba a brindar una gran oportunidad. Ahora, simplemente digo: “Puedo levantarme a la hora que quiera. Estoy completamente a cargo de mi día”. Esto ha revolucionado mis hábitos de sueño y me da una fuerza superior en el camino.
Son las horas que no te pagan las que más te pagarán. -Ramiro Camiña
5. Lo intentaré: Mientras hacía ejercicio, escuché una conversación cerca de mí. Un hombre le dijo a su amigo: “Vamos a hacer un kilómetro y medio”. El amigo respondió: “Lo intentaré”. Mientras observaba a este hombre esforzarse en su cinta de correr para alcanzar una milla, me recordó la gran verdad sobre las palabras: todo lo que digas se hará realidad.
Cuando alguien dice “lo intentaré” demuestra que no está seguro del resultado que desea. Tenemos que tomar posesión de nuestra mente. Esto significa que debemos estar seguros del resultado que queremos y estar dispuestos a conseguirlo a cualquier precio. Tu mente es una herramienta poderosa. Si la aprovechas correctamente, convertirás el “lo intentaré” en “debo”.
Debes aceptar mentalmente un resultado antes de conseguirlo. -Ramiro Caniña
Resumen:
Te reto a que vigiles tu mente con más cuidado. Toma nota de lo que dicen los demás y reconoce lo que has estado verbalizando. Si entiendes el poder de las palabras, te ayudará a tener más éxito en tu vida.
Ramiro Camiña